Por estos días, la plaza de Pocito es testigo de la unión de voces, los pasos de danza mezclados con actuaciones y los sonidos de las guitarras y los bombos. Es que entre todos los integrantes del coro y el ballet de folclore municipal, más el Dúo Díaz-Heredia ensayan lo que el próximo 31 de marzo será "A imagen y semejanza''. La puesta en escena con más de 40 artistas (dirigidos por el coreuta Carlos Stancoff, el bailarín Fabián González y Betty Puga como productora general) más allá de ser una adaptación de dos obras que tienen un sentido religioso -como lo son La Misa Criolla (en homenaje a Ariel Ramírez) y La Navidad Nuestra- se planteó servir de nexo para ayudar a otros. Es por eso que parte de la recaudación se destinará a los Hogares de Belén y por otra parte, será la excusa perfecta para juntar donaciones que repartirán en cada lugar dónde la obra se presente a partir que salga de gira.

 

Es que "A imagen y semejanza" fue elegida por las autoridades municipales como representación de Pocito en el Bicentenario. Por lo tanto, el grupo ya tiene planificada una serie de actuaciones durante el año en distintos puntos de la provincia. La intención es, siguiendo la tónica con la que fue planteada la obra, hacer una obra solidaria en cada departamento. Para empezar irán la próxima semana a Jáchal.

 

"En el estreno nos pareció oportuno apoyar la acción de los Hogares de Belén. Son un símbolo muy ligado a la Sagrada Familia y a las Pascuas ya que ellos son familias que reciben en sus senos a niños que de otro modo estarían en la calle o irían a institutos de menores, les dan contención y cariño como si fueran sus propios padres y hermanos. Por eso, parte del dinero de la venta de entradas será para ellos, para ayudarlos en sus necesidades cotidianas", explicó Carlos Stancoff, que desde su lugar de director del coro, ideó esta obra dónde los bailarines representan actores y los cantantes van haciendo un relato melódico de la historia que cuenta la Biblia.

Mientras que los artistas compartirán lo recaudado pro las entradas con los Hogares de Belén, también ya empezaron a prepararse para juntar donaciones para llevar al primer destino. Está previsto que el domingo de Pascuas al mediodía interpretarán esta obra de música y danza-teatro en la Parroquia de Villa Mercedes, a 15 kilómetros de Jáchal, después, a las 20 en la Iglesia de San José de Jáchal y más tarde, en la plaza principal.

"A partir de hoy empezamos a juntar elementos para llevar a Villa Mercedes, donde sabemos que hay necesidades. Ya tenemos varias cajas con ropa de abrigo, calzado y alimentos no perecederos. Por eso, le pedimos a toda la comunidad que nos ayude con lo que pueda para compartir unas Pascuas realmente solidarias", propone Stancoff, señalando que el lugar para llevar las donaciones es la Casa de la Cultura de Pocito, ubicada en Aberastain y calle 11. Hay tiempo hasta el 3 de abril para sumarse, ya que el 4 es el día de la actuación.

Stancoff como el resto del grupo están más que felices por poder hacer solidaridad a través de lo que mejor saben hacer. "Es un aliciente muy grande hacer algo solidario porque de partida uno sabe que va a servirle a alguien, entonces la puesta en escena tiene otro sentido. No sólo los artistas sino la gente de las instituciones y el público son generosos en ese sentido. Inclusive los municipios se han sumado a esta movida solidaria. Y eso es para aplaudir", expresó orgulloso de la labor que piensan llevar adelante desde Pocito.

Para no quedar afuera

Si bien las boleterías se abrirán martes y miércoles próximo para terminar de vender las entradas antes de la función -que está prevista para el 31 de marzo a las 21:30 en el Teatro Sarmiento- desde ahora ya se pueden adquirir llamando al teléfono 4-216462. Las entradas tienen un valor de 15 pesos.

Una parte de recaudación total de la venta de entradas ya se destinó a los fondos de los Hogares de Belén, la entidad conformada por matrimonios del Movimiento Familiar Cristiano que reciben niños que por decisión judicial fueron separados de sus padres o familias de origen. Ellos -alrededor de 45 familias- tienen una guarda, hasta tanto el juez dispone que vuelvan a su casas o determina que será mejor para preservar a ese niño, una adopción, la que muchas veces recae en los mismos matrimonios de los Hogares de Belén. Actualmente hay más de 50 niños en esta situación.

El dinero, según cuentan Raúl y Rosita Mengual (dos de los asesores de la entidad) servirá no sólo para solventar los gastos del propio gabinete de psicólogas y psicopedagogas que los ayuda en la contención de los chiquitos, algo que es fundamental en estos casos. Sino que además será utilizado para ayudar a las familias de dos pequeños que necesitan tratamientos especiales y la colaboración de una enfermera, aspectos que no cubre la obra social con la que cuentan desde hace unos años.